Nuestras vidas están llenas de transiciones, algunas causadas por nosotros mismos, otras por circunstancias externas. Como adultos, estas transiciones pueden tener que ver con, por ejemplo, relaciones, tener hijos, cambiar de empleo o mudarse de residencia. El proceso es, con frecuencia, complejo e incluye muchas emociones diferentes que abarcan desde incertidumbre inicial, ansiedad y dudas, a mayor autoconfianza, autoestima y optimismo. Los niños también experimentan transiciones cruciales, tanto en su vida familiar como en el colegio. Nuestro papel como profesores, gestores y líderes es apoyarles en todo momento y de todos los modos posibles y crear y mantener una estrecha relación con los padres en este proceso. Tanto si están comenzando el colegio en Early Years, cambiando de ciclo, o entrando en Secundaria, debemos ayudarles a asentarse rápida y felizmente. Este año, todos hemos venido a un colegio nuevo con una gran cantidad de espacios de aprendizaje atractivos y variados, nuevos profesores, nuevas rutinas, modos de aprendizaje expandidos, y restricciones COVID. Más que nunca, tenemos que asegurarnos de que las transiciones sean tranquilas y positivas.

Nuestra prioridad es garantizar que cada individuo se siente atendido, apoyado y apreciado. Los alumnos necesitan que se escuche su voz y creer que pueden aprender de forma efectiva y alegre. Si necesitan cualquier tipo de apoyo, se les proporcionará. Si pueden avanzar más deprisa, se les darán mayores desafíos. A lo largo de toda la vida escolar, desde Early Years a Secundaria, nuestro personal intercambia constantemente información sobre cada niño, respecto a su desarrollo personal y sus logros académicos. Se mantienen reuniones formales y se comparten datos. En EYFS y Primaria hay una potente estructura de apoyo, mantenida por los tutores de cada curso y el equipo de ciclo. Los tutores también juegan un papel esencial en Secundaria. En estos momentos estamos desarrollando un extenso programa personal, social, económico y de bienestar (P.S.H.E.), que permitirá ayudar a cada individuo y, al mismo tiempo, fortalecer la comunidad de alumnos entera.

El colegio conoce bien a sus alumnos, pero los padres también necesitan participar en ese conocimiento. En la situación actual no nos ha sido posible ofrecer, por ejemplo, jornadas de puertas abiertas, sesiones curriculares y reuniones cara a cara con los padres. En estos momentos el colegio está buscando formatos alternativos de comunicación. Recientemente hemos enviado información resumida sobre el curriculum y nuestro proyecto iPad. También se están organizando reuniones con padres por medio de Microsoft Teams, que tendrán lugar antes del “half term break”. Estas sesiones pueden proporcionar información importante acerca de la adaptación de cada niño a un nuevo escenario, instalaciones y comunidad educativa, y sobre sus progresos académicos iniciales.

Son tiempos difíciles para las familias y los colegios. Nos enfrentamos no sólo al miedo a la infección en sí, también a sus posibles consecuencias mentales y emocionales. Trabajando juntos los niños adquirirán herramientas de defensa. Saldrán de esta transición más fuertes y con más determinación que nunca.

Christine Curtis y James Shallcross

Directores de Educación